Ir al contenido principal

¿Qué es una Vacuna?


Image courtesy of Areeya at FreeDigitalPhotos.net

Esta es mi primera publicación en este blog, y quería escribirles sobre un tema que quizás está muy sonado hoy en día, ya que todos estamos esperando esa tan anhelada vacuna que nos va a permitir poder recuperar parte de nuestra normalidad y dejar los tiempos del covid19 como vivencias de reflexión sobre nuestra humanidad. Pero, ¿qué son las vacunas?
Según la OMS “se entiende por vacuna cualquier preparación destinada a generar inmunidad contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos”. Esto quiere decir, que las vacunas evitan que las personas se enfermen de enfermedades infecciosas. 
Para entender un poco cómo las vacunas nos ayudan a protegernos de estas enfermedades, hay que entender cómo el sistema inmunológico nos defiende de los patógenos (bacterias, virus, parásitos).
Cuando nuestro cuerpo es atacado por un microorganismo determinado, el sistema inmune empieza activar y generar una serie de células y moléculas que atacan al mismo, una vez vencida la infección éste genera una memoria inmunológica con células que habían combatido el patógeno y no lo olvidan, transformándose en células de memoria productoras de anticuerpos, los cuales reconocerán más eficazmente y rápidamente a antígenos del patógeno en una segunda infección. (Cabe destacar que el funcionamiento del sistema inmune es complejo y no tan fácil de comprender, con múltiples términos y definiciones que quedaron obviadas en el párrafo anterior, en el cual en futuras publicaciones podríamos conocerlo en más detalle).
Pero te preguntarás y bien ¿cómo las vacunas generan la inmunidad en nuestro cuerpo?  Bueno, las vacunas se realizan de microorganismos muertos o atenuados o de sus toxinas o sus proteínas de superficie  (todos estos elementos se denominan antígenos) y son los que serán reconocidos por el sistema inmune para generar la memoria inmunológica. Por ello cuando somos infectados por dicho patógeno ya nuestra memoria inmunológica lo reconocerá y lo podrá atacar y eliminar rápidamente no permitiendo que se desarrolle la enfermedad o que se desarrolle de manera suave.
Las vacunas son las intervenciones de atención médica más rentables que se sabe que previenen muerte y enfermedad. Todavía hay numerosas enfermedades causando morbilidad y mortalidad globalmente significativas, para las cuales no hay vacunas disponibles. Millones de personas en todo el mundo mueren de malaria y tuberculosis cada año, como también de la actual nueva enfermedad covid19, enfermedades aún sin vacunas efectivas.
Los científicos toman en cuenta diferentes enfoques para el desarrollo de las vacunas, como el conocimiento de como los patógenos infectan a las células de nuestro cuerpo y como responde el sistema inmunitario, otro factor a considerar son las condiciones ambientales, económicas y políticas de las regiones o países en las que se entregará la vacuna, ya que la temperatura, condiciones de riesgos, sociales y económicas son distintas en diferentes partes del mundo.
Los principales tipos de vacunas que existen son: vacunas vivas atenuadas, vacunas inactivadas, vacunas de subunidades, recombinantes, vacunas conjugadas y vacunas toxoides.
Vacunas vivas atenuadas: Estas son vacunas que contienen una versión de bacterias o virus vivos que ha sido debilitado, así que no causa enfermedades serias en personas con sistemas inmunes saludables. Este tipo de vacunas son muy efectivas ya que es lo más parecido a la infección natural actuando como maestros para el sistema inmune. Además, se requiere sólo una única inmunización generalmente, eliminando la necesidad de refuerzos repetidos y son relativamente fáciles de crear para ciertos virus, sin embargo, debido a que son patógenos vivos atenuados este tipo de vacunas no las pueden recibir niños o adultos con sistemas inmunes debilitados; como aquellos que están recibiendo quimioterapia o tengan enfermedades inmunodepresoras o estén bajo un fármaco inmunosupresor. Adicionalmente, estas vacunas generalmente deben refrigerarse y protegerse de la luz por lo que puede ser difícil de usar en aquellos lugares donde hay falta de refrigeración o problemas de electricidad. Ejemplos son: la vacuna contra la rubeola, papera, sarampión y la varicela.
Vacunas inactivadas: Estas vacunas se realizan con bacterias o virus inactivados mediante calor o tratamientos químicos destruyendo la capacidad del patógeno para replicarse, pero lo mantiene "intacto" para que el sistema inmunitario pueda reconocerlo. Estas vacunas en ocasiones necesitan de múltiples dosis para mantener la inmunidad.  El polio, la hepatitis A y la rabia son ejemplos de este tipo de vacunas.
Vacunas toxoides: Previenen enfermedades causadas por bacterias que producen toxinas en el cuerpo. Son estas toxinas debilitadas las que se usan para realizar la vacuna, así que no pueden causar la enfermedad, pero sí generar inmunidad. A estas toxinas se les denomina toxoides. Las vacunas toxoides tienden a no tener una duración de inmunidad comparable a las vacunas atenuadas; por lo tanto, pueden necesitar vacunas de refuerzo para obtener protección continua contra enfermedades. Ejemplo de estas vacunas son las usadas para combatir la difteria y el tétanos.
Vacunas subunidad: Corresponde solamente a partes de los virus y bacterias. Debido a que estas vacunas usan sólo regiones específicas del patógeno, generan una respuesta inmune muy fuerte, que se dirige a la parte infecciosa principal del microorganismo. Estas vacunas pueden ser usadas por casi todo tipo de persona, independientemente de sus condiciones de salud. Una limitación de estas vacunas es que puede necesitar inyecciones de refuerzo para obtener protección continua contra enfermedades.
Vacunas conjugadas: combaten diferentes tipos de bacterias. Hay bacterias que tienen antígenos con una capa externa de sustancias azucaradas, denominadas polisacáridos. Este tipo de recubrimiento disfraza el antígeno, dificultando que el sistema inmune inmaduro de un niño pequeño pueda reconocerlo y generar una respuesta inmunológica. Las vacunas conjugadas son efectivas para estos tipos de bacterias porque conectan (o conjugan) los polisacáridos a antígenos, produciendo una respuesta co-inmune más potente, debido a que los polisacáridos no producen una respuesta inmune potente, sin embargo al estar conjugada a un antígeno, hace que el sistema inmunitario responda mejor a estas moléculas. Estos fragmentos de las bacterias no causan inmunidad, pero cuando se combina con proteínas (antígenos) transportadoras, sí puede producir inmunidad contra futuras infecciones. Un ejemplo de esto es la vacuna Haemophilus influenzae tipo B (Hib).
Vacunas vector recombinante: Estas vacunas usan virus atenuados (o cepas de bacterias) como vectores. Un gen codifica un antígeno de un patógeno determinado puede ser introducido dentro de un virus atenuado o bacteria, los cuales se replicaran y expresaran el producto del gen del patógeno que será reconocido por el sistema inmune. El baculovirus el cual es un virus que infecta a insectos puede ser usado como un vector.
Vacunas de DNA: consisten en plásmidos de DNA que codifican proteínas que corresponden  antígenos de patógeno activando la respuesta inmune. Este tipo de vacunas tiene la ventaja que la proteína codificada corresponde a una forma nativa del huésped y no pasa por un proceso de desnaturalización ni alteración, el manejo y almacenamiento del ADN plasmídico no requiere refrigeración, una característica que reduce en gran medida el costo.
Para finalizar, quisiera mencionar que el desarrollo de una vacuna que esté aprobada para uso humano es un proceso de diferentes etapas, comenzando desde la investigación de la biología del patógeno y su interacción con el huésped, hasta los ensayos clínicos en humanos, lo cual muchas veces son meses de investigación. Todo esto implica inversiones económicas considerables, ya sea por entes privados o públicos. 
Sin más que mencionarles por ahora, espero esta información les haya sido de utilidad, les dejo un vídeo que me gusto mucho que profundiza mas sobre este tema y no olviden subscribirse al blog para recibir las nuevas publicaciones, y recuerden lo que dijo la científica Rita Levi-Montalcini:
"El cuerpo se me arruga, es inevitable, pero no el cerebro. Mantén tu cerebro ilusionado, activo, hazlo funcionar y nunca se degenerará"
.


Referencias:

  1. OMS. Vacunas. Disponible en: https://www.who.int/topics/vaccines/es/. Revisado: 03-04-2020.
  2. Understanding How Vaccines Work. 2018. https://www.cdc.gov/vaccines/hcp/conversations/downloads/vacsafe-understand-color-office.pdf. Revisado 04-04-2020.
  3.  Xiaoxia Dai, Yongmin Xiong, Na Li y Can Jian (5 de marzo de 2019). Tipos de vacunas, vacunas: la historia y el futuro, Vijay Kumar, IntechOpen, DOI: 10.5772 / intechopen.84626. Disponible en: https://www.intechopen.com/books/vaccines-the-history-and-future/vaccine-types. Revisado el 04-04-2020.
  4. Vídeo tomado de: https://www.youtube.com/watch?v=6sc6sPUtqao&list=WL&index=11&t=165s
  5. Image courtesy of Areeya at FreeDigitalPhotos.net



Comentarios

  1. Excelente, me gusto mucho el contenido. Seguiré esperando mas publicaciones

    ResponderEliminar
  2. Me encanta, gracias, atenta a tus publicaciones!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Rita-Levi-Montalcini: yo no soy el cuerpo, soy la mente

Un día como hoy, nace Rita Levi Montalcini una neuróloga Italiana, que aportó grandes conocimientos a la biología. Esta científica realizó estudios que permitieron descubrir el factor de crecimiento nervioso (FCN), que es una proteína necesaria para la formación y sobreviviencia del sistema nervioso. Estas investigaciones fueron el motivo que recibiera el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1986, junto con Stanley Cohen. Rita Levi Montalcini, a sus 98 años en la reunión internacional de NGF de 2008: Conferencia sobre la vida y la muerte en el sistema nervioso, en Kfar Blum, Israel. Foto conrtesía de Audrey en flickr Rita nació el 22 de abril de 1909 en Turín, Italia, en una familia de descendencia judía, fue la hija menor de cuatro hermanos, junto con su hermana gemela Paola, su padre fue un ingeniero eléctrico y matemático (Adam Levi) y su madre una pintora (Adele Montalcini). Inicialmente quiso ser escritora, porque su hermana le contagiaba su entusiasmos hacia la gran